La proteína es un macronutriente clave para abordar una estrategia para la perdida de peso. Respetando unas cantidades mínimas, intentando priorizar las fuentes de mayor calidad (Carne, pescado, huevos, etc.). Con unos timings de ingesta óptimos nos pueden ayudar a conseguir buenos resultados siempre y cuando estemos en un déficit calórico.
¿Por qué es tan importante la perdida de peso?
¡Principalmente, por qué nos ayuda a preservar la masa muscular durante el proceso de déficit calórico!. En este estado el cuerpo buscará la manera de obtener energía. Y si tiene que obtener la energía del tejido muscular, lo va a hacer.
Para preservar el máximo tejido muscular, la ciencia nos apunta a consumir un mínimo de 2g de proteína por kg de peso corporal. Hasta en casos más extremos con déficits calóricos más pronunciados, llegando a 2,5g-3g por kg de peso corporal.
A su vez, la proteína es el macronutriente más saciante junto con las grasas, por ello también es clave mantener su ingesta elevada. Nos ayudará a no tener tanta hambre y a poder llevar el proceso de perdida de grasa de una forma más llevadera.
Lo ideal sería introducir un mínimo de 30g de proteína en cada comida, sin descuidar el resto de macronutrientes que tengáis programados en vuestra planificación nutricional, realizada por un profesional.